SERIE CAMPEONES MADRILEÑOS: Hablamos con Raúl García Pierna

Cuando hablamos con Raúl le encontramos en Alicante, sufriendo los rigores de una cuarentena que se está haciendo dura y larga. Era preceptivo charlar con él, y más cuando en 2019 fue uno de nuestros corredores de referencia, sino el que más, tras verle brillar a nivel nacional e internacional y tanto en carretera como en pista.

A sus 19 años ha debutado este año como sub23 con el todopoderoso Lizarte, y para nada ha decepcionado a la escuadra navarra, ya que le ha visto subir al cajón en ambas especialidades. El año pasado este ciclista de Tres Cantos tuvo un bagaje para enmarcar. En carretera se colgó el bronce en los Nacionales de Asturias, ganó la Copa de España, se impuso en la Vuelta a Cieza y se coló en el podio (incluso con victorias de etapa) en las rondas de Besaya, Ribera del Duero, Valladolid y Trofeo Víctor Cabedo. Asimismo representó a España en los Europeos de Alkmaar y en los Mundiales de Yorkshire.

En cuanto a pista, de cine fue lo suyo. Oro en persecución y puntuación en los Nacionales de Tafalla; 5º en la general de la Copa de España; bronce en el scratch de los Campeonatos de Europa de Gante; y bronce en los Campeonatos del Mundo de Frankfurt. Rememoramos a continuación con él lo que fue una temporada inolvidable.

1.      Una pena esto del coronavirus, porque ha impedido que sigamos disfrutando de la mejor racha del “Jabalí de Tres Cantos”. ¿Buen inicio como sub23, con el bronce en madison en los nacionales de pista y tu primer podio en tu debut en la categoría en el Lehendakari de Urretxu, no? Encima, con el hándicap de no contar en la madison con tu alter ego Javi Serrano…

Si, el inicio de temporada ha sido muy bueno, en pista me encontraba muy bien. Con Javi Ureña sabíamos que, si jugábamos bien nuestras cartas podíamos estar en el pódium, y así fue, acabamos muy contentos. En carretera también me encontré muy bien en Don Benito y en Urretxu, el equipo confió en mí y pude ser 3º con muy buenas sensaciones, aunque me quedé con la espina clavada de no conseguir la victoria.

2.      Tu 2019 con la Fundación Contador sencillamente para enmarcar. De Enero a Septiembre siempre en el cajón. ¿Cuál fue para ti la clave de ese salto de calidad de tu primer año como junior hasta el 2º? ¿Cambios en la preparación física, en nutrición? ¿El paso desde el Plataforma Central a una estructura más grande como la Fundación Contador?

La verdad que fue un año que nunca se me olvidará. En 2018 ya acabé el año andando bien y para 2019 seguí disfrutando de la bici, y cuando disfrutas de lo que haces, todo es más fácil. No sabría decir exactamente el motivo del salto de calidad, cada año intento mejorar un pasito en cosas que dependen de mi (nutrición, preparación…) pero ningún cambio a gran escala, simplemente intentar mejorar pequeños fallos para ir creciendo como ciclista.

3.      Para analizar lo del año pasado, si te parece bien empezamos por carretera. Bronce en los Nacionales de Asturias, victoria final en la Copa de España y siempre entre los mejores en Besaya, Cieza, Valladolid y Ribera del Duero. Incluso corriendo con los sub23 en Valencia fuiste capaz de terminar nada menos que 5º en la general.  Mejor y peor momento de tus competiciones en suelo español y por qué.

En una temporada hay momentos buenos y malos, de todos hay que aprender. Yo diría que mi mejor momento fue la Vuelta al Besaya en general, quizás no era mi mejor estado de forma pero conseguí unos resultados con los que acabé muy contento, ya que era una vuelta que me encantaba y poder ganar la etapa reina y hacer 3º en la general, fue increíble. El peor momento, lo recuerdo en la Vuelta Valladolid, que estaba muy vigilado y ves que cuando tú te mueves no te dejan ni un metro y al resto sí. Es una sensación de impotencia tremenda, pero decidí cambiar el planteamiento e ir a por etapas, y al final conseguí unos buenos resultados.

4.      Otra cosa fue tu periplo con la RFEC en las grandes citas internacionales. No pudiste terminar el Europeo de Alkmaar (caídas y averías) y el Mundial de Yorkshire. ¿Qué balance haces de tu paso por ambas pruebas, aparte de otras que corriste con la Selección como el Trophee Centre Morbihan? ¿Hay mucha diferencia entre nuestro nivel y lo que viste fuera?

Las carreras internacionales de la categoría junior son de mucho nerviosismo y montoneras constantes. Tuve mala suerte con caídas en todas menos en Morbihan, dónde acabé muy contento. El nivel es más alto, ya que están los mejores de cada país, pero son iguales que nosotros y dan pedales igual que nosotros. Con esto quiero decir que no hay que tener miedo porque tampoco es nada de otro mundo. Mi sensación es que por el llano van muy rápido, pero subiendo  en España tenemos un buen nivel.

5.      Para este 2020 te has incorporado nada menos que al Lizarte, toda una referencia en el panaroma elite y sub 23 español ¿Qué te motivó para aceptar el cambio desde la Fundación? ¿Qué te han pedido desde la escuadra navarra que hagas durante tu primer año como sub 23? ¿No te podrán pegas a que compitas en el anillo?

Lizarte es un equipo que siempre me ha gustado. Motivo en concreto no hay ninguno, cada equipo es una manera diferente de ver el ciclismo, no hay ninguna mejor ni peor, y yo me siento más identificado con la filosofía de Lizarte. Me transmiten tranquilidad, que aprenda y que confían en mí. Me exijo yo mas a mí mismo de lo que ellos me exigen a mí. En cuanto a la pista no me ponen ningún problema, de hecho me apoyan y hacen grandes esfuerzos para que corra, lo que es de agradecer en mi opinión.

6.      Vamos a la pista precisamente. Te vimos por primera vez con la Selección Madrileña a principios de 2018. La cosa fue tan bien que en los Campeonatos de España de aquel año ya subiste al cajón con Javi Serrano en la madison (plata) y con el propio Serrano, Mario Sampedro y Javier Ureña en la persecución por equipos. ¿Cómo surgió competir en esta disciplina y cómo te viste en tus inicios dentro de ella?

Siempre me ha encantado, desde muy pequeño he ido a ver carreras de pista. Creía que se me podría dar bien así que decidí ir a probar ese año. Antonio (Pérez, N del A.) decidió llevarme a ese campeonato y ahí vi que, pese a no haber entrenado mucho en ella, se me podría dar bien, pero que me faltaba un poco todavía para poder estar disputando por ganar, pero acabé muy contento.

7.      Y ya el año pasado te vimos explotar a lo grande en esta especialidad. Oro en persecución individual y oro en la puntuación en los Nacionales de Tafalla. Encima das el salto con la Selección Española, colgándote nada menos el bronce en el scratch de los Europeos de Gante y también esa misma medalla en la puntuación de los Mundiales de Frankfurt, pelo teñido de amarillo incluido. ¿Te esperabas semejante cosecha? De esas 4 medallas, ¿cuál fue la más sufrida y cuál te hizo más ilusión?

En pista fue un año soñado, la más sufrida yo diría que fue la del Mundial. El día anterior había sido relegado de la victoria en el scratch, por lo que en la puntuación salí a ganar. Fui liderando toda la carrera y a falta de 8 vueltas arranqué para no jugármela al sprint, pero fui cazado a solo 1 vuelta siendo bronce al final. Ese día lo di todo encima de la bici, me bajé de ella que no sabía casi ni dónde estaba, pero también fue la que más ilusión me hizo.

8.      Tema familia. Siendo hijos de un expro de dilatada trayectoria como es Félix García Casas, raro hubiera sido que no acabárais en el ciclismo. ¿En qué aspectos has aprendido de tu padre para llegar a lo que has logrado hasta ahora? ¿Qué crees que es lo más importante que te ha aportado?

Ser hijo de alguien que ha sido profesional en el ciclismo tiene cosas positivas, pero también negativas. Mi padre me ha enseñado mucho desde pequeño y todavía lo sigue haciendo. Creo que lo más importante que me ha enseñado es la constancia y el trabajo diario, que los objetivos no se consiguen de hoy para mañana.

9.      Tu hermano Carlos es otro de los corredores sub23 más destacados a nivel nacional. ¿Cuáles crees que son las diferencias más acentuadas entre ambos? ¿En qué le ganas tú o en qué crees que eres mejor que él, y viceversa?

Somos corredores de tipos diferentes. Él es un corredor de perfil escalador y yo, aunque subo bien, soy un corredor con más punta de velocidad.

10.  Técnicos de la FMC. De todos ellos, Ángel Serrano, Lute Anguita, Antonio Pérez y Pablo Galán… ¿Qué destacarías de cada uno de ellos?

Con Ángel he tenido relación desde pequeño, aunque como técnico solo pude compartir con él el Campeonato de España de Soria 2018. Lute es una gran persona, a mí me ha tratado siempre genial y como Director mi experiencia con él ha sido muy buena. Siempre me ha apoyado y me ha transmitido confianza y eso como corredor se valora mucho, personalmente le tengo mucho aprecio y cariño. En cuanto a la pista, con el que más trabajo es con Antonio, que es el que se encarga de los corredores de fondo. Desde el primer año confió en mí para llevarme al Campeonato de España. Y durante la competición, que están a tope de trabajo porque tienen una carrera tras otra, siempre ha estado pendiente de mí para cualquier cosa que necesitara. Con Pablo trabajo menos, pero siempre es un apoyo en los momentos malos en competición.

11.  Tema confinamiento. Cuando hablábamos para concertar esta charla, tu primera frase fue “esto es interminable”. ¿Tu preparación alternativa cómo está siendo? ¿Este parón hace cambiar tus objetivos para este año en el sentido de perjudicar más a pista o a carretera?

Se me está haciendo muy pesado el confinamiento, pero todos tenemos que poner de nuestra parte para solucionar esta situación. Afronto esto como si fuese otra pretemporada, cuando sepamos exactamente cómo va a quedar el calendario, plantearemos junto al equipo la vuelta a la competición. Seguiré como hasta ahora con la pista y la carretera.

12.  Corredores del ciclismo que son referencia para ti. De antes y de ahora y por qué.

Corredores de referencia no tengo, hay algunos que me gustan como Valverde, Nibali o Pogacar.

Fotos FMC, Trackpiste, Fundación Contador Team, RFEC, UCI y Lizarte